sábado, 16 de enero de 2010

3 motivos... de muchos...

Hay tres condiciones básicas (y por básicas quiero decir que son las que se me ocurren en este momento) por las cuales no puedo dedicarme a la política:

1. Como queda demostrado con el post anterior, soy un desesperanzada y no creo que esta humanidad vaya a tener éxito.  Y cuando digo éxito me refiero a sobrevivir.  Así que gobernar, ¿para quién? ¿para esta eventualidad que somos? me parece poco trascendente... ¿para, si estoy de verdad muy de buenas y hago muy buena labor, lograr un cambio pírrico, que no afectará para nada a la totalidad del mundo? no le veo la gracia...

2. Por eso mismo, el único puesto que me sirve es presidente del mundo (cargo ocupado por un anónimo super poderoso, para el cual no se hacen elecciones) y mi plan de gobierno sería: "Acabemos con todo lo que hemos inventado y volvamos a empezar"... muy difícil de mercadear.  No creo poder conseguir asesor de campaña.

3.  No soy la mejor persona del mundo y no sé si me alcanza siquiera para buena persona, pero creo que soy suficientemente buena persona como para chocar con el perfil de esos cargos.

Por lo tanto, lo siento, pero se le informa a la opinión pública que no.  No me dedicaré a la política.  Y no lloren, que no me van a manipular con lágrimas...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Anita: para hacer política, se necesita tener el cuero del cínico, y la astucia del mentiroso que es capaz de engañar a sus electores, alimentándoles su ignorancia y obstruyéndoles su capacidad de pensar por si mismos... tu no tienes esa madera del lider político, porque tu eres fundamentalmente honesta.
Jairo

Ana María Mesa Villegas dijo...

Lindo papito!!!!!!!!! esa fe!

Jorge dijo...

Creo que ni un eventual presidente del mundo podría, con todo el poder y el aparato a su favor, crear un mundo que lo complazca, un mundo a su imagen. Es mejor encerrarse en el cuarto y hacerlo un mundo perfecto para uno mismo.

Ana María Mesa Villegas dijo...

: D

La idea de encerrarse en el cuarto me parece bien... siempre y cuando no sea solo...

Anónimo dijo...

Ani… estoy de acuerdo con la idea de juanito: crear un mundo a su imagen. un mundo interior reflexivo, analítico es la idea del yo con yo ante la realidad… eso empieza cuando cualquier ser se sacude del bagaje que trae y empieza ayudado por el sopesamiento de lecturas, a pensar por si mismo… a ser auténtico; eso a mi me sucedió, cuando entré a la universidad… noté que yo era un barullo de ideas de otros.
jairo

Anónimo dijo...

y uno es un barullo de ideas de otro, por cosas culturales, la infancia en la cultura de los padres, luego en colegios, las barras y despues la U y uno mismo

Anónimo dijo...

entonces aprendes algo sustancial para poder convivir con los demás: TOLERANCIA... hay que acepetar que yo soy y los demás son los demás, diferentes a mi, pero con sus derechos... es decir, yo no soy el ombligo del mundo, sino que somos plurales... así, maduramos