Con el clima que hace por estos días en Manizales no es raro que los animales busquen refugio de la lluvia en donde mejor les parezca que pueden pasar una noche secos.
El señor seguramente tuvo una mañana difícil. Como deben ser difíciles la mayoría de las mañanas de los hombres y mujeres que, en consideración de su edad, ya deberían estar pensionados, pero que tienen que levantarse temprano, para irse a vender chucherías y conseguir cualquier peso para un atado.
Y esa mañana al abrir el puesto de dulces no dudo que ambos, el señor y la paloma, se miraron a los ojos asustados, sin saber qué hacía el otro ahí.
7 comentarios:
Impulso, esa es la cuestión.
Buena foto...triste pero bonita (asumanera). Igual que el relato.
tantas cosas se "solucionan" asi, que tristeza.
me dejaste frío...
sin palabras como normalmente suelo estar...
Sí. Hay ocasiones en las que algunos se miran a los ojos y no saben bien qué está haciendo el otro allí. Y reaccionan con el primer impulso. Sólo que después se dan cuenta de que ése no era el adecuado. Y que mataron algo más que la oportunidad de hacer las cosas distintas.
Wow, este es un texto bellísimo, enormemente triste, pero bellísimo.
Lala
Me gusta contestar a los comentarios... pero realmente, sobre este post, no tengo nada más que decir.
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