"Un pueblo que pasa de la interpretación de músicas populares a la constitución de una Orquesta Sinfónica, es un pueblo que ha evolucionado en su entender estético... no cualquier pueblo lo hace, son necesarias ciertas condiciones especiales..." no es una cita textual, pero algo así fue lo que dijo Alejandro Mantilla del Ministerio de Cultura el año pasado en Junio cuando nos reunimos con varias personas a conversar sobre nuestro proceso sinfónico.
Manizales lo hizo... tuvimos por más de 20 años un proceso sinfónico. Los últimos 9 años, como un proyecto formalmente constituido al interior de la Universidad de Caldas y que fue entendido como un proyecto de ciudad, en el que era necesario que participaran todas las estancias naturalmente convocadas.
Es un proyecto distinto a los demás porque logró generar un espacio intermedio donde los intérpretes de instrumentos sinfónicos completaran su formación como tales, ya que muy pocos graduados de las carreras de música del país, salen luego de 5 años de formación con el nivel de Orquesta Sinfónica... este proceso llenaba ese vacío... aquí lo terminamos de formar, para que Usted pueda ser profesional de su instrumento... en música de nada sirve un cartón si Usted no toca bien el repertorio que debe. Nuestro proceso hacía eso... le daba a los músicos la posibilidad de desarrollar una actividad profesional con todo el estatus que eso tiene, con el compromiso de retribuirlo en enseñanza y formación para los que venían en camino y con el compromiso de irradiar estos conocimientos a través de conciertos para la ciudad.
Dejar morir este proceso no es de organizar un "plan B" ajustado a nuestra realidad económica. Las consecuencias son históricas: se muere la ópera, se mueren los grupos de cámara, se irá nuestro talento a buscar otros lugares en el mundo en dónde ser soldados de otros procesos culturales, que no son el nuestro, encontrarán con seguridad a donde ir, son excelentes, son formados aquí... ya se nos han ido muchos (Jota, las Pilares, Leonardo, Sebastián, Juan Carlos, Sergio, Alexandra, mi María Adelaida y mi Jenny... muchos más, quiénes??), se acabará la posibilidad de estrenar ópera... Manizales es la única ciudad que lo ha hecho en Colombia, la posibilidad de que surjan compositores para este formato, intérpretes de instrumentos sinfónicos, directores de orquesta sinfónica... habrán 600 conciertos menos en la ciudad, se dejarán de atender necesidades en el programa de Bandas de Caldas, en Batuta y en la Universidad de Caldas. Perderemos la oportunidad de ser ciudad no por el número de centros comerciales que tengamos, sino por nuestros procesos humanos. El "plan B" por bueno que sea será inferior. No seremos tan grandes como sabemos que podemos. Qué hay más mediocre que eso?
Para qué sirve la cultura... en términos económicos y prácticos. Será que los que hemos sido actores de estos procesos no sembramos nada en una comunidad que los deja morir tan fácilmente? De no tener cultura seríamos bárbaros, no habríamos dejado las cavernas y parece que allí quisiéramos volver. Si somos capaces de preguntar para qué sirven las artes, probablemente no seamos capaces de entender la respuesta... sin embargo ensayemos una: para reconocernos, para saber qué tan grandiosos podemos ser, para entender la diferencia entre lo bello y lo feo, para tener parámetros con los cuales medirnos y saber de qué somos capaces como especie, para no conformarnos con nacer, crecer, reproducirnos y morir, para darle un sentido a nuestra vida, para hacer un aporte de lo que es realmente trascendente...
Nadie se pregunta para qué hacer dulces, para qué hacer cigarrillos, para qué hacer licor... no, eso todo es rentable, da plata... hay que hacerlo, nos hace competitivos... y gordos y nos enferma de cáncer de pulmones y de hígado... pero da plata...
Cuál es nuestro propósito? tener más? o ser más? y si tenemos más y no somos más, no sabremos qué hacer con más... estoy como Libertad, enredando lo más simple... pero así es... nada peor que un rico inculto, no sabe usar bien su riqueza, es cursi, tonto, tosco, patético y generalmente poco le dura el dinero. Pero parece que eso queremos ser todos juntos como comunidad, sin que nadie tenga ningún argumento en contra de esta postura que valora solo lo económico por encima de lo humano.
Y sí, ahora mucha gente hablará mal del proceso, dirá que muchos de sus objetivos no se cumplieron y que era muy costoso, desproporcionado para esta ciudad tan pequeña. Y hablarán mal de las personas que allí estuvieron... siempre convivimos con eso, unas veces sus voces tuvieron más eco que otras... Claro que el proceso no es perfecto... cuál lo es? pero era bueno, bien pensado y tiene mil logros para mostrar... mil logros que se acabarán, que dejarán el vacío histórico de lo que una vez fuimos capaces de hacer, nosotros, con nuestro talento, para nosotros... estas son las cosas que hacen patrimonio y en términos económicos, estamos botando a la basura el patrimonio humano que nos hemos demorado tanto en construir.
Lo cierto es que los esfuerzos (que si hubo, muy notables) fueron insuficientes, somos responsables todos. Toda la ciudad, todo el departamento, toda la nación. Usted! y yo!
Y se irán Cosco, Víctor, los Ricardos, Mike, Deybis, Juan Carlos volverá y se irá, todos... y no tendrán a qué volver los que ya se fueron... y serán excelentes músicos de otras ciudades, arraigándose a procesos que no son los suyos, a ciudades que no son las suyas y en ninguna de esas ciudades harán más falta que acá. Yo quiero pedirles perdón, siento que debí hacer más.
Personalmente esta decisión me afecta, la ópera desaparece y yo llevo 10 años de mi vida aprendiendo y aportando en ese espacio... siempre lo dije en cuanta reunión teníamos: sí, venir aquí a intentar cantar, actuar y bailar es muy bueno... pero no es por eso por lo que debemos venir, es porque es un espacio de ciudad que debemos garantizar a los que vienen después... por eso muchas veces a pesar de los inconvenientes uno defiende estos espacios, porque son terreno ganado a pulso, que dependen de tanto y de tan poco.
Y de pronto ocurra un milagro y ojalá ocurra un milagro... pero no necesitamos más soluciones coyunturales, necesitamos soluciones estructurales... de lo contrario, tampoco deberíamos aceptar milagros... a veces el que quiere ayudar estorba, cuando no sabe cómo hacerlo bien hecho.
Y podría decir mil cosas más... lloro y me apasiono, pero que eso no reste mi credibilidad, es porque entiendo las dimensiones de lo que sucede... porque sé que para que Manizales vuelva a tener una orquesta sinfónica, si en esta llevamos 20 años, nos demoraremos 40 más... o sea que no me va a tocar.
El jueves entrante habrá un concierto de cierre, de despedida, para nosotros, para la ciudad... todo el que quiera cantar, todo el que quiera interpretar su instrumento, será bienvenido... porque esto es de todos y a todos se nos muere el alma un poco...
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